martes, 16 de diciembre de 2014

México lindo (I): Nuevo León (Monterrey y Santiago)

Mi biblia de México
Pesos mexicanos
 
Ahora sí que sí me toca hablaros de mi ruta mexicana de 10 días.
Un viaje increíble, lleno de nuev@s experiencias y lugares.
Como os podréis imaginar, el viaje dio mucho de sí y tengo material para rato así que he decidido dividirlo en 3 posts: uno para Monterrey, otro para el DF y otro para Cancún.

Empezando por el principio, salí de DC un viernes a media tarde y volé primero a Houston.

Vuelo DC-Houston
Reagan Airport, uno de los 2 aeropuertos de DC



Todo ready

Sobrevolando el Pentágono, en la vecina Virginia
Souvenirs texanos


Delicatessen texanas


G. Bush padre, que da nombre al aeropuerto de Houston
 
En Houston se retrasó mi vuelo a Monterrey así que para cuando por fin pisé suelo mexicano ya era bastante tarde.

Formulario de entrada a México

 
!Menos mal que mi family seguía esperando pacientemente! Fue emocionante porque vinieron a buscarme mi prima Maitane y su amiga Lorena, y mis tíos Alberto y Zita, que se casaron hace 20 años y a los que no veía desde entonces.

Fotos familiares para el recuerdo. Boda de mis tíos allá por 1994.


Yo soy la del medio y tenía 7 años por aquellos tiempos. !Anda que no ha llovido desde entonces!

Como aterricé tarde, dormimos directamente en casa de mis tíos, en la colonia Lomas del Hípico. Me resultó curioso que allí muchas urbanizaciones o colonias tuvieran garita de seguridad, aunque visto lo que se oye tampoco es de extrañar.

Vistas desde casa de mis tíos a la Sierra Madre

Una vez desayunados, mi tío nos acercó hasta la residencia de mi prima en el Instituto Tecnológico de Montererrey (TEC), y de allí condujimos hasta el centro de Monterrey, donde pasamos el día de turisteo.



 
 
Muy fan del vocabulario mexicano
Piscina en la residencia del TEC


Una de las vistas a la Macro Plaza


Interior de la Catedral Metropolitana de Monterrey

Barrio Antiguo

 

Comimos en el restaurante Tenerías, junto al canal. Tomamos tostas,caldo tlalpeño (con pollo y aguacate) y tacos gobernador (con camarones y bacon).
En el Paseo de Santa Lucía subimos al barquito que recorre el canal y lleva hasta la zona de la antigua Fundidora. Y es que Monterrey es la tercera ciudad más grande de México (y capital del estado de Nuevo León) y un polo industrial muy importante. De hecho la zona del parque de la Fundidora me recordó a Bilbao, con su fábrica y sus áreas reconvertidas.


Barco por el Paseo de Santa Lucía
Primera comida mexicana


Sede del Gobierno de Nuevo León

Vista del Cerro de la Silla, símbolo de Monterrey


Antigua fábrica de la Fundidora




En el barquito

Con Lorena y Maitane en Fundidora

A la vuelta había espéctaculos cerca del Museo de Historia Mexicana, en la Macro Plaza.


 
 
Ya por la noche fuimos a cenar y volvimos a la resi para la fiesta de cumpleaños de una amiga de mi prima.

Cócteles a la mexicana

Ya el domingo nos recogieron mis tíos. Primero paramos en el Obispado, el mirador de Monterrey, y luego fuimos a comer a Santiago, a unos 30-45 mins de Monterrey.

Cartel en Monterrey


Vista del Cerro de la Silla desde el Obispado


Edificio del Obispado, con un museo en el interior



Reencuentro familiar tras 20 años
Monterrey

Como os decía, fuimos a comer a Santiago, un pueblito muy mexicano a las afueras del gran Monterrey. En el Restaurante las Palomas estuve en la gloria: la decoración y el ambiente muy auténticos, la comida buenísima y la mejor compañía.
Pedimos queso fundido con champis, machacado con huevo natural, arrachera (un corte de carne). Y de postre gorditas (como pastas), pan de elote con canela y leche quemada. !Todo delicioso, para reptir de nuevo!


Preciosos recipientes para que los tacos no se enfríen


Machacado con huevo

Arrachera con patatas asadas y chiles

Gordita, pan de elote y leche quemada

El patio del restaurante
Árbol de la vida en el restaurante


 
Tras la comida paseamos por el pueblo. Hicimos algunas compras en el mercado de artesanía y subimos a la plazoleta del mirador desde el que se va la presa.

Mirador

Presa
Coloridas calles del pueblo



 




Iglesia del pueblo



Ya a la vuelta de Santiago hacia Monterrey pasamos por los cavazos, unos arcos de puestos callejeros a pie de carretera.






Y de allí directos al aeropuerto porque me tocaba volar a México DF a proseguir con la aventura. Os contaré el resto en el siguiente post. !Órale güey!


Cartel en la carretera camino al aeropuerto